En un giro audaz hacia la sostenibilidad y la inclusión, las áreas montañosas de América del Sur están experimentando un auge en proyectos de vivienda asequible. Estas iniciativas no solo buscan ofrecer un techo a precios accesibles, sino también integrar a las comunidades en un entorno que respeta y se adapta al paisaje natural.
Los proyectos, liderados por un consorcio de arquitectos y urbanistas locales, están utilizando materiales autóctonos y técnicas de construcción innovadoras que minimizan el impacto ambiental. En regiones como los Andes peruanos y chilenos, estas viviendas están diseñadas para resistir condiciones climáticas extremas, al tiempo que incorporan tecnologías de energía renovable y sistemas de gestión de agua eficientes.
Este enfoque no solo mejora la calidad de vida de los residentes, sino que también promueve un modelo de desarrollo sostenible que podría replicarse en otras regiones montañosas del mundo. Con el apoyo de gobiernos locales y organizaciones internacionales, estas iniciativas están demostrando que es posible construir un futuro más equitativo y ecológico en las alturas.