En 2025, el turismo sustentable ha dejado de ser una tendencia pasajera para convertirse en un pilar fundamental de la industria hotelera. Los alojamientos ecológicos, que combinan confort con prácticas amigables con el medio ambiente, están ganando terreno rápidamente en América Latina, ofreciendo a los viajeros una experiencia única y consciente.
Desde las selvas tropicales de Costa Rica hasta los desiertos de Atacama en Chile, los hoteles ecológicos están transformando el paisaje turístico. Estos establecimientos no solo minimizan su impacto ambiental mediante el uso de energías renovables y la gestión eficiente de recursos, sino que también promueven la conservación de la biodiversidad local y el apoyo a las comunidades indígenas. Según un informe reciente de la Organización Mundial del Turismo, el 60% de los viajeros en la región prefieren alojamientos que demuestren un compromiso real con la sostenibilidad.
El crecimiento de los alojamientos ecológicos en América Latina no solo representa una respuesta a la demanda de los consumidores, sino también un paso crucial hacia un futuro más sostenible. A medida que más viajeros buscan experiencias que respeten el entorno natural y las culturas locales, la industria hotelera tiene la oportunidad de liderar un cambio positivo. Así, los refugios verdes no solo ofrecen un lugar para descansar, sino también una oportunidad para reconectar con la naturaleza y contribuir a su preservación.