La construcción, tradicionalmente un sector de cimientos sólidos, ahora busca edificar sobre pilares de datos inmutables y transparencia. Estamos en 2025, y la integración de la tecnología blockchain en el software de gestión de proyectos y la cadena de suministro del sector ya no es una promesa futurista, sino una realidad en expansión. Esta adopción está impulsando la eficiencia operativa y una trazabilidad sin precedentes, elementos cruciales para la sostenibilidad de la industria. Para entender mejor este impacto, conversamos con la Ing. Marta Gómez, Directora de Innovación en Constructech Latam, quien nos ofrece una perspectiva clara sobre las transformaciones que estamos viviendo.

—**Ing. Gómez, ¿cómo está impactando blockchain específicamente en el software de gestión de proyectos de construcción a corto plazo?**
—Su impacto es significativo, especialmente en la integridad y auditoría de datos. Al integrar blockchain con plataformas BIM (Building Information Modeling), cada modificación, cada versión del modelo, se registra como un bloque inmutable. Esto no solo minimiza errores y conflictos, sino que también establece una trazabilidad documental infalible. Para fines de 2025, proyectamos una reducción de hasta el 8% en sobrecostos relacionados con disputas documentales en proyectos de gran escala, particularmente en ciudades como Buenos Aires, donde la complejidad de las obras requiere una precisión extrema en la gestión de la información. El software habilitado con blockchain nos brinda esa certeza.
—**Y en la cadena de suministro, ¿qué rol juega, sobre todo pensando en la sostenibilidad?**
—Es fundamental. La cadena de suministro se vuelve mucho más transparente. El software basado en blockchain permite una trazabilidad completa de materiales, desde su origen hasta la instalación en obra. Esto es vital para las certificaciones de sostenibilidad. En ciudades como Santiago y Medellín, estamos viendo proyectos que utilizan esta tecnología para verificar la procedencia de madera certificada, acero reciclado o componentes de bajo impacto ambiental. Esto puede significar un ahorro del 15% en los procesos de certificación ambiental, al tiempo que refuerza la confianza de inversores y clientes en la sostenibilidad del proyecto. Los contratos inteligentes, por su parte, automatizan pagos y liberaciones al cumplir hitos verificables, agilizando enormemente los flujos financieros y reduciendo la burocracia.
—**¿Qué desafíos existen y cuáles son las proyecciones de adopción para el resto del año en la región?**
—El principal desafío sigue siendo la inversión inicial en capacitación y la adaptación de la infraestructura tecnológica existente. Sin embargo, el retorno en eficiencia y seguridad es innegable. Estimamos que para finales de 2025, al menos el 20% de los proyectos de infraestructura y edificación de gran envergadura en la región, especialmente en urbes como Ciudad de México, integrarán algún componente de software con tecnología blockchain. Esta adopción será impulsada por la creciente demanda de transparencia, la reducción de riesgos de fraude y, sobre todo, la presión por incorporar prácticas de construcción cada vez más sostenibles y éticas.

La conversación con la Ing. Gómez subraya que el blockchain no es una moda pasajera, sino un pilar tecnológico que está fortaleciendo la infraestructura digital del sector de la construcción. Su capacidad para generar confianza, optimizar procesos y certificar la sostenibilidad está redefiniendo los estándares de la industria. Con una proyección de adopción creciente para el 2025, los cimientos de la construcción moderna se están erigiendo sobre bloques de datos inmutables, prometiendo un futuro más transparente, eficiente y responsable.


