La creciente búsqueda de bienestar y armonía en el hogar ha llevado a muchos argentinos a considerar el Feng Shui como una guía esencial en sus proyectos de remodelación. Esta antigua práctica china, que enfatiza el flujo de energía, o ‘chi’, ha encontrado un nuevo espacio en la arquitectura y el diseño interior contemporáneo. A medida que las personas pasan más tiempo en casa, la necesidad de crear ambientes que promuevan la tranquilidad y el equilibrio se hace cada vez más evidente. Desde la disposición de muebles hasta la selección de colores y materiales, el Feng Shui ofrece un enfoque holístico que transforma no solo los espacios físicos, sino también la calidad de vida de sus habitantes.
En el ámbito nacional, arquitectos y diseñadores están incorporando principios del Feng Shui en sus proyectos de remodelación, respondiendo a un mercado que demanda cada vez más soluciones que integren estética y bienestar. Elementos como la luz natural, la ventilación adecuada y la organización del espacio son considerados esenciales. Por ejemplo, el uso de plantas no solo mejora la estética, sino que también contribuye a la purificación del aire y al aumento del bienestar psicológico. Adicionalmente, estudios han demostrado que la disposición adecuada de los muebles en un salón puede influir en las relaciones interpersonales, promoviendo un entorno más colaborativo y armonioso. La arquitectura moderna en ciudades como Buenos Aires y Córdoba está empezando a reflejar estas tendencias, con un énfasis en la sostenibilidad y el respeto por el entorno, alineándose así con la filosofía del Feng Shui que aboga por la conexión con la naturaleza. Las remodelaciones inspiradas por esta práctica no solo buscan embellecer, sino también crear espacios que fomenten un estilo de vida más equilibrado y saludable.